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La mente es la que forma nuestra personalidad. Nuestra personalidad no está en una única característica de hecho hay muchos aspectos de la personalidad humana. En cada uno de nosotros hay muchas singularidades que se mezclan y que nos hacen únicos. Todas están incrustadas en nuestro cerebro.
Nuestra personalidad se comienza a formar en el momento de la concepción, es cuando se hereda la personalidad de sus padres y serán muchas de sus características. Para saber si somos extrovertidos nos basta con una sola gota de limón. Hay dos grupos para este experimento, para nuestro equipo de introvertidos tenemos a unos científicos y para el de extravertidos, son un equipo de monitores de verano. Se necesita un limón, un psicólogo y muchas lengua. El experimento consiste en saber cuanta saliva son capaces de producir estimulando con una gota de limón a las glándulas salivales para ver cuantas cajas de fruta pueden sellar con cinta adhesiva. Esa gota de limón nos dará una pista de lo que sucede en el cerebro. El resultado es que los extravertidos han conseguido chupar menos metros de cinta que los introvertidos. Esto se debe a la reacción del cerebro al estímulo, hay un área que reacciona tanto al zumo de limón como a conocer gente, en los introvertidos esta área es muy sensible lo cual significa que reaccionan bien al zumo de limón pero que no le gustan las fiestas. En los extravertidos esta área no es tan sensible por eso reaccionan poco al zumo de limón pero les encantan las fiestas.
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